¿Eres de esas personas que se le hincha el abdomen después de comer, presentas gases o eructos con sabor a los alimentos o notas como tus jugos gástricos suben hasta tu garganta provocándote dolor o molestias? Si padeces alguno de estos síntomas, es porque, tus digestiones no se están haciendo de manera adecuada.
Falta de enzimas por una mala alimentación: estas son necesarias para deshacer los alimentos y que podamos asimilarlos fácilmente. Sin ellas, el alimento no se descompone en su totalidad provocando alteraciones digestivas.
Malos hábitos alimenticios: la siesta, hacer movimientos físicos intensos después de comer, comer rápido o estresado, a deshoras, hablar durante las comidas, beber durante las comidas y las comidas demasiado copiosas. Todo esto, repercute en la acumulación de gases y hace que la digestión se paralice o se haga más lenta.
Inadecuada alimentación: comer fritos, alimentos refinados, grasos, alcohol o el tabaco.
Estreñimiento: ir regularmente al baño limpia el tubo digestivo y ayuda a equilibrar la microbiota repercutiendo en todo nuestro organismo, especialmente en nuestro aparato digestivo.
Existen una serie de remedios naturales que pueden ayudarnos a combatir las malas digestiones, como son:
Aloe vera: potente regenerador y protector de las mucosas digestivas que nos ayuda en caso de acidez o reflujo, favorece la absorción de nutrientes y es ligeramente laxante.
El Jengibre: estimula la digestión, suprimiendo los gases. Tomar con cuidado en caso de acidez estomacal.
Las enzimas digestivas: Facilitan la digestión, previenen flatulencias, contrarrestan la acidez estomacal y reducen el riesgo de intolerancias alimentarias
El Hinojo y anís: poderosas plantas que ayudan a equilibrar las funciones digestivas, reduciendo la hinchazón y las flatulencias. Combate el estreñimiento. Muy útiles en caso de padecer Gastritis, Colitis o Colon irritable.
L-Glutamina: es muy importante en el equilibrio acido-base ayudando a eliminar el exceso de amoniaco en el Hígado (órgano que interviene en las digestiones) y ayuda a corregir patologías como intestino permeable.
El Carbonato de Magnesio: nos ayuda a un correcto movimiento intestinal evitando el estreñimiento.
Fuente de probióticos y prebióticos: estos los puedes encontrar en alimentos como el kéfir, yogur, ajo, la escarola, chucrut sin pasteurizar, tempeh, miso, kombucha o en capsulas y polvos. Nos ayudan al proceso digestivo reduciendo los gases y mejorando las digestiones.
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